Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

I Samuel 20, 23-28

23 Cuanto a la palabra que tú y yo tenemos hablada, mira, Yahveh
está entre los dos para siempre.»

24 David se escondió en el campo. Llegado el novilunio, el rey se
puso a la mesa para comer.

25 Se sentó el rey en su asiento, como de costumbre, en el asiento de
la pared; Jonatán se sentó enfrente y Abner al lado de Saúl; el asiento de
David quedó vacío.

26 Saúl no dijo nada aquel día, porque pensó: «Será un accidente, no
estará puro por no haberse purificado.»

27 Al día siguiente del novilunio, el segundo día, se fijaron en el
asiento de David, y Saúl dijo a su hijo Jonatán: ¿Por qué no ha
venido a
comer ni ayer ni hoy el hijo de Jesé?»

28 Jonatán respondió a Saúl: «David me pidió con insistencia poder ir
a Belén.